La reciente disolución de Les Soulèvements de la Terre y las nuevas formas de censura
La fabrique ha publicado un comunicado a raíz de la reciente disolución de Les Soulèvements de la Terre.
En La fabrique llevamos 25 años publicando ensayos, por lo que nos ha sorprendido saber que uno de ellos, publicado hace más de 3 años (en 2020), ha sido citado como parte de la acusación en el decreto de disolución del movimiento ecosocial francés Les Soulèvements de la Terre.
Cómo dinamitar un oleoducto: nuevas luchas para un mundo en llamas, escrito por el geógrafo y académico sueco Andreas Malm y traducido a 8 idiomas, se inspira en el legado de Martin Luther King y las sufragistas, y es un best-seller internacional: si este libro presentara el más mínimo problema a nivel jurídico (y no las obsesiones de Gérald Darmanin, ministro del Interior de Francia), se habría perseguido. Pero no ha sido así. Se trata, pues, de un ataque por la espalda a las libertades de expresión, de prensa y de edición, así como a las leyes que las rigen.
No es la primera vez que un libro de nuestro catálogo –que nunca fue objeto de ningún procedimiento judicial– se moviliza con fines represivos. Así ocurrió en el asunto Tarnac, cuando el texto íntegro de L'insurrection qui vient (La insurrección que viene) se incorporó al expediente de una acusación antiterrorista como prueba contra los autores, lo que supuso una bofetada a las autoridades y una absolución colectiva de los acusados. Estas son las nuevas formas de censura, violación de las libertades e intimidación que pesan sobre las editoriales en Francia.
Les Soulèvements de la Terre genera un debate de interés general, y corresponde a los editores y a la prensa mantenerlo vivo. Esta es la tarea que abordamos trabajando con ellos en un proyecto de libro. Lo que hagamos con el agua, la tierra y la energía en los próximos años y décadas no es una cuestión que pueda dejarse en manos de tecnócratas o de una minoría irresponsable. Es una cuestión democrática de elección social, y pronto de supervivencia. Un día, todos seremos almas de la tierra.